La gestión para la expansión de las Unidades de Cuidado Intensivo, UCI, en los hospitales públicos del departamento, para la atención de la pandemia generada por el COVID-19, ha dejado en la red pública 216 UCI, que ahora, dentro de la planificación de servicios de las ESE, son una respuesta a la atención de cuidados inmediatos para pacientes con otras patologías.

Así lo dio a conocer la directora de Prestación de Servicios de la Secretaría de Salud, Lyda Marcela Pérez Ramírez, quien resaltó lo positivo que dejó la pandemia, pues el departamento paso de tener 66 unidades de cuidado intensivo a 216, y teniendo en cuenta que ya se ha controlado el contagio del virus, pues casi el 80% de estas UCI están cerradas, lo que demuestra el fortalecimiento del sector Salud que ha podido mitigar el riesgo.
“Queremos fortalecer estos servicios, hoy se encuentran los gerentes de las ESE del departamento haciendo un análisis muy minucioso para que como estas UCI ya no van a atender pacientes COVID, puedan garantizar la atención a personas que tengan otras patologías, para que no tengan que desplazarse a otros lugares del Departamento y puedan acceder a esta atención en salud”, señaló la Directora de Prestación de Servicios.
Agregó que el trabajo en equipo, contribuyó a jalonar esfuerzos mancomunados de una manera mucho más rápida, pero sobre todo con muchos más beneficios para la población.
“Se ha notado en el último año, que el trabajo integrado, tanto del departamento, municipios, IPS y aseguradoras, ha servido para disminuir los riesgos para nuestra población, alcanzar coberturas útiles no solo en vacunación contra COVID-19, sino también en los demás temas de salud, entonces creo que la lección está aprendida y nos dejó un gran logro que pudimos fortalecer con la pandemia y fue el trabajo intersectorial con las instituciones, estamos atentos a apoyar todas las circunstancias y las necesidades que tengan las IPS y la población, para seguir avanzando”, indicó la Directora.
Fuente: Prensa Secretaría de Salud de Boyacá